miércoles, 10 de noviembre de 2010

Despedida + 1 Semana en Guatemala

Luego de 9 meses de vivir en Alemania, experiencia que considero como una de las más enriquecedoras de mi vida, llegó el momento de regresar a mi país, Guatemala... Hay pocas oportunidades que lo dejan a uno marcado, ésta ha sido una de ellas.

Debo admitir que los últimos días fueron difíciles en ciertos sentidos: En primer lugar el hecho de no saber con exactitud qué camino me esperaría, el hecho de despedirme de tantos buenos amigos - algunos unos de mis mejores amigos hoy en día - y también dejar algo que fue parte de mi vida, un trabajo, una ciudad, un estilo de vida...

Estoy muy agradecido, en primer lugar con Dios por la experiencia que se me dio, y también con tantas personas que siempre estuvieron ahí para apoyarme y para mostrarme con el más mínimo detalle cuanto valiosa era la amistad. Durante mi última semana un buen grupo de amigos prepararon una fiesta de despedida para mí, de la cual tengo muy buenos recuerdos, una tarjeta, una playera de Costa Rica, un tamborcito de Tunisia y muchos buenos deseos.

Nunca tuve la oportunidad de escribir sobre los amigos más cercanos que conocí en estos meses, por lo que lo haré en este momento brevemente:

- Sonja: Una persona que estuvo ahí en todo, en las buenas y en las malas. Me mostró con cada detalle una muestra sincera de cariño y apoyo. Hoy, es con quien comparto una relación muy especial y quien vendrá a visitarme el 12 de noviembre!

- Fernando: Un buen amigo de Costa Rica, a quien considero como mi hermano. Siempre estuvo ahí pendiente y siempre mostró lealtad y sinceridad, algo que valoro mucho. Espero poder visitarle el próximo año.

- Bart: Siempre tenía una broma para hacernos reír (y también una cerveza). Un buen amigo, quien sabía reír de lo más simple.

- Asia: Siempre alegre, siempre aventurera y alocada, digna de ser llamada "pipiriche". Siempre estaba viendo qué hacer, a dónde ir y qué celebrar, pero sobre todo sabía compartir cada momento.

- Mehdi: Como buen tunisio, un buen cocinero y preparador de arguileh. Un amigo leal quien gustaba de la compañía de sus amigos y compartir su tiempo preparando abundantes y sabrosas cenas en su casa. Siempre buscaba momentos para compartir.

Llegó el día que debía llegar, el de mi regreso a Guatemala, con una mezcla de emociones, nervios, tristezas y alegrías. En el momento de aterrizar en mi país sentí una nostalgia y una alegría de ver de nuevo a mi gente. Mi familia me esperaba en el aeropuerto y me tenían un almuerzo muy especial en casa, con familia y amigos.

Después de una semana, recordé la última nota que hice antes de venir y aunque aún no se exactamente qué haré ni donde trabajaré, me he dado cuenta del apoyo que necesita mi país. He viajado a algunos lugares y me he dado cuenta lo hermoso que es, los paisajes, los celajes, el clima, los volcanes, la cultura, la gente... sin embargo, vivimos - muchas veces sin darnos cuenta - de la ayuda que necesita mucha gente. Aún hay muchos problemas de racismo, violencia, falta de oportunidades, degradación ambiental, salud y educación... y me doy cuenta que mi sueño se relaciona con ayudar, ayudar a tener un mejor país, un mejor lugar donde vivir... aunque pueda pasar para ello algún tiempo para lograrlo, en lo que incremento mi experiencia, mi estabilidad y mis ideas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario